Las teorizaciones filosóficas sobre los sentimientos humanos no me parecen reales. Son constructos teóricos en los que cada objeto de análisis es una premisa que debe contribuir a la teoría final, al modelo que cada filósofo ha creado. Por ello precisamente suelen alejarse bastante del esquema mental del ser humano. Se mueven en un marco excesivamente intelectualizado en el que se prescinde de las emociones. Seguir leyendo Compasión